Anticoagulantes: para qué son, riesgos y consejos
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Anticoagulantes: para qué son, riesgos y consejos

Anticoagulantes: para qué son, riesgos y consejos

Hoy os hablamos de los anticoagulantes, para qué son, sus riesgos y consejos. Hoy, 18 de noviembre, se conmemora el Día Nacional del Paciente Anticoagulado, una fecha que nos invita a reflexionar sobre la importancia de estos tratamientos en la prevención de complicaciones cardiovasculares graves, como el ictus, la trombosis venosa, en arritmias por fibrilación auricular y en patologías valvulares. En Asistencia Cardiológica, queremos aprovechar esta oportunidad para concienciar a nuestros pacientes sobre el papel crucial que juegan los anticoagulantes en su salud.

¿Para qué son los anticoagulantes y por qué son tan importantes?

Los anticoagulantes son medicamentos que reducen la capacidad de la sangre para formar coágulos. Estos fármacos son fundamentales para pacientes con condiciones como:

  • Fibrilación auricular
  • Trombosis venosa profunda
  • Embolia pulmonar
  • Prótesis valvulares cardíacas

 

Riesgos asociados a los anticoagulantes:

Aunque los anticoagulantes son esenciales para prevenir complicaciones graves, su uso no está exento de riesgos. Algunos de los más comunes incluyen:

  • Hemorragias y hematomas: es el riesgo más significativo. Puede manifestarse como sangrado en encías, hematomas frecuentes o incluso hemorragias internas graves.
  • Interacciones con otros medicamentos: los anticoagulantes pueden interactuar con ciertos fármacos, suplementos e incluso alimentos, alterando su eficacia.
  • Interacciones con algunos alimentos: solo en algún tipo de anticoagulantes se debe moderar el consumo de algunos alimentos como los ricos en Vitamina K. Consulta con tu médico.

Consejos prácticos para pacientes con anticoagulantes:

A día de hoy, gracias a los nuevos avances en medicina, tenemos a nuestra disposición nuevos anticoagulantes para patologías específicas o puntuales que no requieren los controles que requería antiguamente medicamentos como el Sintom (acenocumarol). A pesar de esto, un tratamiento anticoagulante efectivo requiere compromiso y seguimiento. Aquí te dejamos algunas recomendaciones:

  1. Realiza controles regulares de INR:

    No sería necesario para los nuevos anticoagulantes pero sí para aquellos como el Sintrom (acenocumarol) o la
    warfarina, en los que es fundamental medir tu índice internacional normalizado (INR). Este valor indica qué tan bien está funcionando el medicamento y ayuda a ajustar la dosis para mantenerte dentro del rango terapéutico seguro.

  2. Mantén una dieta equilibrada y constante:

    Los alimentos ricos en vitamina K, como las espinacas, el brócoli o las coles, pueden contrarrestar el efecto de algunos anticoagulantes. No se trata de eliminarlos, sino de consumirlos en cantidades regulares. Consulta con tu
    médico o nutricionista para encontrar el equilibrio adecuado.

  3. Evita actividades con alto riesgo de lesiones:

    Deportes de contacto o actividades que puedan provocar caídas aumentan el riesgo de golpes o cortes que pueden ser peligrosos. En su lugar, opta por ejercicios de bajo impacto, como caminar, nadar o practicar yoga.

  4. Reconoce los signos de alerta y actúa a tiempo:

    Si notas moretones inusuales, sangre en orina o heces, sangrado abundante o prolongado en heridas, o mareos inexplicables, acude inmediatamente a tu médico. Estos pueden ser signos de hemorragias internas o externas que requieren atención urgente.

  5. No suspendas el tratamiento sin supervisión médica:

    Dejar de tomar los anticoagulantes sin autorización médica puede ser extremadamente peligroso, ya que aumenta el riesgo de formación de coágulos. Si necesitas interrumpirlo por alguna razón, siempre hazlo bajo la
    guía de tu cardiólogo.

  6. Consulta siempre antes de tomar nuevos medicamentos:

    Algunos analgésicos, antibióticos o suplementos, como la hierba de San Juan, pueden interferir con la efectividad de los anticoagulantes o aumentar el riesgo de hemorragias. Antes de iniciar cualquier tratamiento, infórmale a tu médico.

En conclusión, el tratamiento anticoagulante salva vidas, pero debe ser llevado con responsabilidad y un adecuado seguimiento médico. En el Día Nacional del Paciente Anticoagulado, te invitamos a tomar conciencia sobre su importancia y a seguir cuidando tu salud cardiovascular. Si tienes dudas o quieres realizar un chequeo, estamos aquí para ayudarte.

En Asistencia Cardiológica, ofrecemos seguimiento personalizado y tecnología avanzada, como nuestro ecógrafo 3D, que permite un monitoreo detallado del corazón y las arterias, ayudando a prevenir complicaciones cardiovasculares.

Si quieres saber más sobre la ecocardiografía 3D, no te pierdas el vídeo de la Dra. Mª Teresa Gonzalez Alujas haciendo clic aquí.


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